La enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) es una condición que cursa con acidez, dolor de pecho e incluso dolor y ardor en la garganta. También puede causar un cierto sabor amargo en la boca. Es común que en la farmacia nos pidan medicación para tratar este problema pero ¿por qué sucede? ¿cómo se puede tratar? ¿Se cura alguna vez? Respondemos esta y otras preguntas en este artículo.
¿Por qué sucede el reflujo gastroesofágico?
Entre el esófago y el estómago tenemos un esfínter llamado cardias, encargado de permitir el paso de la comida desde el esófago hacia el estómago y de cerrar el camino inverso. Cuando por algún motivo el cardias se debilita y no cierra bien (hormonas, problemas anatómicos, etc) el cierre estomacal no se produce correctamente y el contenido estomacal puede salir al exterior del estómago y contacta con la mucosa del esófago, de la garganta y de la boca. El estómago tiene un recubrimiento mucoso que le permite resistir el ácido estomacal y las enzimas digestivas, pero el esófago y la garganta no tienen protección frente a este ataque; de ahí que aparezca irritación, dolor o ardor en la zona de la boca del estómago, del pecho y de la garganta.
Existen algunos mecanismos diferentes, como el que sucede en el reflujo alcalino, pero el más común es el que te hemos explicado.
¿Qué factores aumentan el riesgo de que el cardias no cierre bien? Algunos son:
- Problemas anatómicos como la hernia de hiato, una condición en la que el estómago puede “salir” ligeramente de la cavidad abdominal hacia la cavidad torácica.
- Embarazo. El embarazo aumenta la presión intra-abdominal por los cambios de volumen y los cambios hormonales relajan el cardias. Ambos factores facilitan la salida de contenido estomacal al esófago.
- Obesidad. La obesidad aumenta la presión intra-abdominal. Muchas veces los síntomas de la ERGE mejoral al perder peso.
- Problemas autoinmunes que afecten al tejido del que está hecho el cardias, como la esclerodermia.
- Retraso del vaciado estomacal, incluido el causado por medicamentos. Los antiinflamatorios y algunos medicamentos para la salud cardiovascular (concretamente los bloqueadores de canales del calcio) enlentecen el vaciado estomacal.
- Medicamentos que relajan el cardias, dificultando su cierre. Entre estos medicamentos encontramos las hormonas femeninas, los antidepresivos tricíclicos y benzodiacepinas como el diazepan.
¿Cómo se controla el reflujo gastroesofágico?
Lamentablemente no hay manera de forzar el cierre del cardias, por lo que el tratamiento del reflujo se basa en medidas dietéticas y en medidas farmacológicas:
- Evita los alimentos que te causan acidez. Entre ellos puedes encontrar comidas muy grasosas, bebidas carbonatadas, tomates, cebollas, ajo, picantes, alcohol, café o té.
- Come poco varias veces al día en vez de hacer una o dos comidas copiosas.
- Evita recostarte, hacer ejercicio o esfuerzos inmediatamente luego de comer.
- Evita el tabaco, pues la nicotina podría relajar el cardias. Además, el tabaco reduce la salivación, cosa que afecta la digestión y facilita la aparición de acidez.
- Evita la ropa ajustada y los cinturones muy apretados.
Es importante controlar la acidez y el reflujo, pues la irritación continua de las mucosas puede llevar a un deterioro importante de la calidad de vida (insomnio, mal humor) y a complicaciones como úlceras, hemorragias o lesiones malignas. Las medidas farmacológicas implican el uso de medicamentos que controlan la acidez estomacal, que controlan el acceso del contenido estomacal al esófago, o ambos a la vez. Dependiendo la intensidad o la frecuencia de la acidez puede que te convenga más uno u otro.
¿Qué medicamentos existen para tratarlo?
Dependiendo de cada caso el médico puede recomendar unos u otros, pero en principio podemos mencionar:
- Los inhibidores de la bomba de protones o IBP. El más conocido es el omeprazol, pero hay otros. Controlan la acidez estomacal, bajando la posibilidad de que el contenido que sale al esófago lesione la mucosa.
- Antagonistas de los receptores H2 como la famotidina (Pepcid® y genéricos) . También controlan la acidez del contenido estomacal. Suele usarse la famotidina cuando se retiran los IBP al final del tratamiento o cuando los IBP no son adecuados por algún motivo.
- Procinéticos como la domperidona o levosulpirida (Motilium®, Levogastrol® y genéricos). Facilitan el vaciado gástrico y se usan en los casos en los que la ERGE cursa con retraso en el vaciado estomacal.
- Antiácidos. Controlan puntualmente los síntomas relacionados con la acidez y pueden complementar a los medicamentos anteriores, pero por sí solos no son suficientes para controlar un caso de ERGE. Los antiácidos basados en bicarbonato no se recomiendan en ERGE pues por la frecuencia con la que se necesitan y por su mecanismo de acción pueden causar más problemas que soluciones. Se suelen preferir los antiácidos no sistémicos, es decir, los basados en calcio, magnesio o aluminio (como el Almax® o el Bemolan®).
Cada caso es diferente, de ahí que que el médico pueda pautar distintas moléculas, durante distintos períodos de tiempo. En tu farmacia de confianza pueden ayudarte a entender mejor tu tratamiento, facilitando su seguimiento y acelerando tu recuperación.
¿Hay productos naturales para controlar el reflujo gastroesofágico?
Sí, hay productos naturales para controlar los síntomas del reflujo gastroesofágico. Entre ellos encontramos:
- Alginatos. Son productos derivados de las algas. Funcionan creando una barrera para que el contenido del estómago no pueda subir por el esófago. Los medicamentos de la marca Gaviscon® están hechos a base de alginatos. En este caso particular recomendamos utilizar un medicamento y no un extracto o una infusión de algas, pues la mayoría de los preparados comerciales están orientados a un uso dietético por el efecto saciante de las algas, no al control de la acidez.
- Mucílagos. Los mucílagos presentes en las flores de malva, la raíz de malvavisco, las semillas de lino y las semillas de llantén menor ejercen una actividad protectora del estómago, por lo que pueden aliviar la acidez que cursa con dolor estomacal o irritación esofágica.
- Pectinas. ¿Has notado que la manzana te quita el dolor de la acidez? No es casualidad, pues la manzana contiene pectinas, moléculas capaces de proteger mucosas.
- Alimentos alcalinos. La patata, el plátano o el melón son productos alcalinos que pueden ayudar a compensar la acidez estomacal.
- Regaliz. El regaliz contiene glicirricina (antiinflamatoria) y flavonoides (posible actividad antisecretora de ácido estomacal). El Iberogast® contiene extracto de regaliz en su composición.
- Plantas consideradas digestivas, como el boldo o la cúrcuma. El mecanismo podría radicar en favorecer la digestión, evitando que el estómago esté lleno y por lo tanto, evitando la regurgitación (subida de contenido estomacal) asociada a las comidas copiosas.
Muchas de estas plantas tienen más de una propiedad (los mucílagos son laxantes, las algas son ricas en yodo) por lo que te recomendamos que hables con tu farmacéutico de confianza a la hora de utilizar estas plantas para la acidez. En tu farmacia sabrán indicarte si un preparado comercial es apto para la acidez o si está pensado para otros usos, o incluso si es adecuado que utilices estos productos en tu caso particular. Recuerda que natural no significa inocuo, y muchas veces un medicamento de síntesis puede ser más adecuado que un producto natural.