¿Qué es la colitis ulcerosa?

La colitis ulcerosa es una enfermedad inflamatoria intestinal, una de las más comunes a nivel mundial. La inflamación suele ocurrir en el intestino grueso, particularmente el colon, pero en casos menos frecuentes puede extenderse al recto o a otras zonas. Hay componentes genéticos y factores ambientales que influyen en esta enfermedad. Es frecuente que nos pidan consejo en la farmacia para convivir mejor con la enfermedad porque los brotes pueden afectar la calidad de vida del paciente. ¿Qué es exactamente la colitis ulcerosa? ¿Cómo se trata? ¿Qué se puede hacer para llevar mejor la enfermedad? Veamos…

¿Qué es la colitis ulcerosa?

Empecemos por el principio. Las células epiteliales de nuestro intestino, las que están en contacto con toda la materia alimentaria y fecal, actúan como una barrera que evita que los productos del interior del intestino estén en contacto con las células intestinales más internas. En los pacientes con colitis ulcerosa, esta barrera epitelial intestinal falla, con lo que el sistema inmune intestinal está mucho más en contacto con moléculas que lo estimulan. Este exceso de estimulación del sistema inmune termina “confundiéndolo” y el sistema actúa contra el propio intestino, atacándolo y alterando la mucosa intestinal hasta que aparecen heridas y ulceraciones en la pared intestinal.

Se ha visto también que la flora intestinal juega un rol en la colitis ulcerosa. Parte del mecanismo inflamatorio podría venir de un desequilibrio entre la flora intestinal y el sistema inmune, generándose una respuesta inmune exagerada frente a bacterias que normalmente no son patógenas. Una vez más, esta respuesta exagerada termina causando lesiones al intestino.

¿Qué síntomas presenta?

La colitis ulcerosa puede cursar con varios síntomas diferentes, entre ellos encontramos:

• Diarrea con o sin moco, muchas veces sanguinolenta.
• Dolor abdominal (“retortijones”).
• Malestar general.
• Sensación de urgencia para defecar.
• Pérdida de peso
• Fiebre

La enfermedad suele cursar por brotes. Los casos varían de persona a persona: algunos pacientes sufren más de 10 deposiciones diarreicas al día, mientras que otros eliminan materia fecal de consistencia normal con algo de moco. También puede haber expresiones intraintestinales de la enfermedad, como dolor articular o inflamación ocular. 

¿Cómo se trata la colitis ulcerosa?

El tratamiento de la colitis ulcerosa lo establece el médico en función del cuadro de cada paciente, pero a grandes rasgos podemos mencionar los siguientes medicamentos:

• Analgésicos. El tratamiento de base es el paracetamol, ya que los antiinflamatorios como el ibuprofeno o el naproxeno son dañinos para el intestino inflamado. En algunos casos el médico puede añadir codeína o tramadol.
• Medicación para inducir la remisión. Es medicación que puede inducir la remisión de los brotes, es decir, hacer que un brote “baje” en intensidad de síntomas con más rapidez que si se dejara que evolucione solo. Mesalazina, azatioprina, corticoides, tacrolimus, ciclosporina o biológicos como el infliximab entran en este grupo.
• Medicación para mantener la remisión. Es medicación que se mantiene en el tiempo para evitar que la enfermedad vuelva a presentar un brote. Los tratamientos más frecuentes son la mesalazina tópica o por vía oral, la azatioprina y en casos más “rebeldes” se recurre al infliximab. Esta medicación debe utilizarse todo el tiempo que el médico lo indique, ya que la ausencia de síntomas no significa curación, sino control de la enfermedad. Dejar la medicación antes de tiempo facilitará la aparición de brotes.

El médico valora según el paciente cuál o cuáles pueden ser los tratamientos más adecuados en cada caso y en cada momento. También puede valorarse la cirugía si no hay una buena respuesta a la medicación o si está contraindicada por algún motivo.

Un capítulo aparte merecen los antidiarreicos. La loperamida (Fortasec®, Salvacolina®) es de venta libre pero, en el caso de los pacientes con colitis, no se recomienda utilizarla sin consejo médico. ¿Por qué? Porque está contraindicada en casos severos y en casos que puedan desembocar en una condición llamada colon megatóxico. Frente a una diarrea de varios días de duración coméntalo en tu farmacia de confianza antes de recurrir a los antidiarreicos por tu cuenta.

¿Qué se puede hacer para mejorar la colitis ulcerosa?

No todo es medicamento en el tratamiento de la colitis ulcerosa. Cuando dispensamos los tratamientos de colitis ulcerosa solemos hacer hincapié en las medidas que mejoran la calidad de vida de un paciente con colitis:

• Cuidar la dieta. La cafeína, el alcohol, los lácteos no fermentados, los alimentos muy ricos en fibras, las bebidas efervescentes, las patatas, los edulcorantes, el gluten y los dulces pueden empeorar los síntomas. Es mejor evitarlos pues pueden empeorar un brote o incluso desencadenarlo. También es conveniente observar si algún o algunos alimentos en particular causan síntomas, para así evitarlos.
• Evitar el estrés. El estrés es un conocido desencadenante de brotes. Mindfulness, ejercicio físico, terapia psicológica, plantas medicinales… las herramientas que se utilicen para gestionar el estrés repercutirán positivamente en la vida de pacientes con colitis.
• Evitar los antiinflamatorios. Si en algún momento necesitas medicación para el dolor puedes hablar con tu farmacéutico de confianza, que sabrá aconsejarte. Por ejemplo, frente a un dolor de muñeca es posible que una muñequera y una crema con árnica sean una mejor opción que un ibuprofeno para un paciente con colitis.
• Respetar el calendario de vacunación. La medicación contra la colitis tiene efecto inmunosupresor, por lo que es importante darse las vacunas que recomiende el personal médico o de enfermería. Covid, neumococo y gripe suelen ser las vacunas recomendadas a todos los pacientes adultos, y en algunos casos se puede añadir alguna más.
• Utilizar probióticos. Una buena flora bacteriana puede ayudar a mantener la salud intestinal.
• Utilizar complementos alimenticios. En casos de dietas muy restrictivas o con dificultad para absorber nutrientes es posible utilizar algunos productos para complementar hasta restablecer la salud intestinal. Algunos estudios han mostrado resultados prometedores cuando se utilizan suplementos en pacientes con colitis, entre ellos los ácidos grasos omega-3 o la curcumina.

Y si tienes dudas respecto a tu medicación o a otros aspectos de la gestión de la colitis ulcerosa, consulta en tu farmacia de confianza. Allí sabrán aconsejarte adecuadamente o te derivarán al médico según tu situación.