¿Qué es el insomnio, qué lo causa y cómo tratarlo?

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¿Qué es el insomnio?

El insomnio puede definirse como la dificultad o insatisfacción al dormir. La insatisfacción resulta de una valoración personal de la calidad del sueño que considera más de un aspecto:

La conciliación del sueño (“me acuesto pero no puedo dormir”).
La duración (“duermo bien pero no más de cuatro horas”).
La calidad del sueño (“duermo ocho horas pero me levanto más cansado de lo que me acosté”).
La consolidación del sueño (“me despierto varias veces y no duermo profundamente”).

Causas del insomnio: ¿Por qué sucede?

Hay muchas razones detrás de la aparición del insomnio, tanto agudo como crónico:

Factores ambientales: luz, ruido, cambios de horario laboral, jet-lag…
Factores psicológicos: duelo por fallecimiento, período de exámenes, rupturas de pareja y otros factores que causan “estrés”.
Patologías físicas: apnea de sueño, dolor agudo intenso, sofocos de la menopausia, picor importante, etc.
Patologías de origen psicológico o mental: depresión, demencia.
Relacionado con sustancias: consumo excesivo de cafeína, retirada de medicamentos para dormir en personas que han abusado de ellos, uso de medicamentos que dificultan el sueño, consumo crónico de alcohol, uso de drogas que implican agitación o nerviosismo, etc.

Si estás sufriendo de insomnio es importante ver, además de cómo resolver el insomnio, si logras reconocer alguna causa detrás de este síntoma. Resolver esa causa será lo que haga que el insomnio desaparezca realmente.

Tipos de insomnio

Dependiendo del grado de trastorno del sueño, podemos diferenciar distintos tipos de insomnio:

Insomnio agudo

Es el que suele ser de corta duración ya que solo aparece en días puntuales y puede durar días o semanas. Este insomnio es el tipo más común, afectando también al mantenimiento y conciliación del sueño. Generalmente se suele dar a causa de eventos traumáticos y puntuales, la presencia de un trastorno psiquiátrico como podría ser el estrés o la ansiedad, presiones familiares, entre otras situaciones que envuelvan alteraciones emocionales.

Insomnio crónico

Cuando el insomnio dura más de tres meses se considera como crónico. En la mayoría de los casos el insomnio se presenta como un síntoma secundario derivado de otro problema médico, el consumo de ciertos medicamentos o presentar otros trastornos del sueño. El alto consumo de alcohol, tabaco y cafeína puede también tener influencia.

Sin embargo, el insomnio crónico también puede ser un caso independiente sin otra causa aparente. Aunque aún no hay razones claras de su origen, se puede asociar con la presencia de estrés constante, malestar emocional, trabajar en turnos, entre otros.

¿Qué hacer cuando tienes insomnio? Tratamientos

Una vez se han identificado las causas, se pueden aplicar tratamientos y medidas para recuperar la falta de sueño. Es recomendable informar a tu equipo de atención médica de la situación para que puedan ofrecer los recursos más apropiados para tu caso. Generalmente, se inicia con tratamientos no farmacológicos, exceptuando casos particulares, y dependiendo del progreso se puede optar por tratamientos farmacológicos.

Tratamiento no farmacológico

Por ejemplo, existen tratamientos y recomendaciones generales como las siguientes:

Se debe evitar los ejercicios intensos antes de acostarse a dormir.
Establecer una rutina para ir a dormir.
Evitar comer comidas pesadas antes de dormir y dejar un margen de 2h antes de conciliar el sueño.
Evitar el consumo de alimentos y sustancias estimulantes como la nicotina, la cafeína y el alcohol.
No tomar siestas largas.

También existen tratamientos no farmacológicos llamados terapias cognitivo-conductuales (TCC-l). Estas terapias tienen la finalidad de producir cambios en términos psicológicos, conductuales y fisiológicos para evitar la aparición y el mantenimiento de la falta de sueño. Por ejemplo:

Técnicas de relajación: El uso de biorregulación, relajación muscular progresiva y ejercicios de respiración pueden ser efectivas en la reducción de ansiedad antes de irse a dormir.
Privación de sueño: Esta terapia se basa en reducir el tiempo que el paciente pasa en la cama y evitar las siestas para restringir el sueño durante el día y aumentar el cansancio para la noche.
Insomnio aprendido: La terapia consiste en reducir el estrés y ansiedad que envuelve poder dormir, y mantenerse despierto en vez de esperar a conciliar el sueño.
Control de estímulos: Este es un método que sirve para evitar factores que no permitan conciliar el sueño. Esto incluye establecer horas constantes para dormir y despertar, salir de la habitación si no se puede dormir en 20 minutos, entre otros.

Aunque estas técnicas suelen tener un efecto positivo a largo plazo, para una mayor efectividad se requiere una participación activa por parte del paciente.

Tratamiento farmacológico

Los tratamientos farmacológicos, también conocidos como somníferos, pueden ayudar a los pacientes a conciliar el sueño y poder dormir. Es recomendable no depender de somníferos por lo que suelen servir como tratamiento en el corto plazo (entre 4 semanas y 3 meses). Algunos ejemplos son los siguientes:

Zolpidem (Ambien®, Edluar®, Intermezzo® y Zolpimist®): Hipnótico dentro de la categoría de análogos a las benzodiazepinas que afecta al cerebro para que la persona pueda sentir sueño.
Zaleplon (Sonata®): Medicamento hipnótico que ralentiza la actividad cerebral como método para conciliar el sueño.
Ramelteon (Rozerem®): Es un medicamento que afecta los niveles de melatonina, un químico del cerebro que se necesita para el sueño.
Eszopiclona (Lunesta®): Es un hipnótico no benzodiazepínico el cual afecta al cerebro para que la persona pueda comenzar a sentir sueño.
Suvorexant (Belsomra®): Este medicamento tiene la función de bloquear una sustancia química del cerebro llamada orexina y la cual se encarga de la alerta y la vigilia de este órgano.

Cabe mencionar que el consumo de medicamentos somníferos pueden tener efectos secundarios por lo que es imprescindible consultar con un médico o con tu farmacéutico.

Consecuencias del insomnio ¿Por qué importa resolver el insomnio?

La insatisfacción con la calidad de sueño no suele estar relacionada con el propio sueño en sí, sino más bien con las consecuencias que la falta de sueño acarrea al otro día. Los pacientes con insomnio se acercan a la farmacia pidiendo una solución porque “no rinden”, están de mal humor, les falla la memoria, les baja la motivación, se sienten cansados y bajos de energía, etc. Esto impacta la vida personal, académica y laboral. También se está estudiando la relación del insomnio con la salud: se ha visto que en algunos pacientes la falta de sueño puede subir la tensión arterial, facilitar la aparición de diabetes, favorecer la obesidad, e incluso disminuir la expectativa de vida.

Una vez tratado y corregido el insomnio la calidad de vida mejora muchísimo, por lo que en cuanto notes que la calidad de tu sueño está cambiando, habla con tu farmacéutico de confianza. En las farmacias ecoceutics sabremos aconsejarte para que mejores la calidad de tu sueño, y, si lo necesitas, se te puede recomendar algún tratamiento puntual. Puedes leer más en este artículo sobre medicamentos para el sueño.